Cien años de Chuquicamata
Chuquicamata cumplió ayer 100 años. La histórica mina de cobre, inició un 18 de mayo de 1915 sus operaciones industriales, aunque su labor es mucho más antigua. De hecho, hay registro de que ya los pueblos originarios sacaban mineral extraído en esa zona.
Chuquicamata explica lo que es el Chile moderno, tanto del siglo pasado, como el actual. Llevó la gran minería a otro estado y ha permitido al sector público contar con recursos frescos permanentes para construir caminos, hospitales y enormes beneficios de todo tipo.
Durante un siglo, Chuqui ha acompañado al país con una entrega sorprendente, de sus trabajadores, con una veta fantástica y mucho ingenio humano.
Para esto fue clave la figura de Albert Burrage, un banquero y emprendedor de Boston, Estados Unidos, quien revisó la zona y envió periódicas muestras de minerales a estados Unidos para su análisis. Eso y la búsqueda de inversionistas en ese país hicieron el resto. La familia Guggenheim e Hijos se sumó a la iniciativa y así se creó la Chile Exploration Company el 11 de enero de 1912, para en marzo de 1913 comenzar la construcción de las instalaciones, las que siguieron adelante a pesar del inicio de la Primera Guerra Mundial y los problemas económicos mundiales.
Así llegó el 18 de mayo de 1915, fecha fijada para la inauguración. En Chuqui, Tocopilla y Santiago, se esperaba el vamos de una obra histórica.
A las 11:30 horas del 18 de mayo, el Presidente Ramón Barros Luco, desde su salón de despacho en La Moneda, apretó el botón eléctrico, el cual en conexión con los alambres del Telégrafo del Estado, produjo la corriente necesaria para poner en movimiento las maquinarias de la planta eléctrica en Tocopilla, que en conexión con las del establecimiento en Chuquicamata dieron movimiento a la maquinaria de la planta.
Desde entonces, la historia es relativamente conocida y Chuquicamata sigue allí, con nuevos desafíos, pero con la misma entrega por el país.