La angustiosa espera de quienes necesitan ayuda para reconstruir
Temporal. Cuatro familias damnificadas relatan cómo cambió su vida después de la avalancha de agua y barro que entró en sus viviendas por las intensas lluvias en Antofagasta.
Tuvieron que sacar el piso para poder retirar el barro. Sus muebles cubiertos de lodo están en la entrada de la casa como mudos testigos del aluvión que dejó inhabilitada su hogar.
Rosa Santander y Feliciano Astorga son un matrimonio que está pasando por difíciles momentos. Perdieron todos sus enseres, sus camas, sólo alcanzaron a salvar un refrigerador, que no saben si va a funcionar.
El día de la lluvia su tío estaba en la vivienda, y su cama fue alcanzada por el barro. "Debimos llevarlo a casa de otros familiares. Acá está húmedo y hay mal olor", sostuvieron.
Dice que fueron los vecinos quienes la ayudaron a sacar el barro. "Llegaron además unos jóvenes que venían del sector sur, eso nos dijeron, y fueron como unos ángeles que cayeron del alto cielo", acotó Rosa Santander. Comentó que no tenía dinero para pagar a alguien que le ayude a retirar los escombros.
También los vecinos en muchos sectores, están preocupados porque tras las lluvias, llegaron los visitantes indeseados, es decir, roedores de diversos tamaños.
"El agua de la alcantarilla cayó con fuerza. Pido ayuda para reconstruir. Si hay otra lluvia o un temblor esto se viene abajo", comentó Héctor Valdivia, de Puerto Natales Nº5741 en la población O'Higgins.