'Insuficiente' fue la palabra más empleada para calificar el aporte de $6 mil millones anunciado por el gobierno para limpieza, retiro de escombros y reparación de infraestructura básica en 13 comunas afectadas por las precipitaciones de la semana pasada, entre ellas, Antofagasta y Taltal.
La suma, que ya comenzó a ser transferida a los municipios, equivale al 1,3% de los recursos que se destinaron en 2014 al Transantiago (US$725 millones) y al 0,6% de lo que se planea invertir en los próximos años para mejorar las capacidades del Metro (US$1.490 millones).
Y aunque desde el gobierno aseguran que se trata de un aporte 'inicial' que aumentará una vez que los catastros de daños estén terminados, lo cierto es que la incertidumbre y la disconformidad existe.
Prioridades
El presidente del Consejo Regional, Mario Acuña, dijo que si bien el FNDR puede concurrir con recursos para apoyar en temas prioritarios, como construcción de viviendas o infraestructura crítica, el grueso debe financiarse con recursos adicionales, aportados por los sectores y el nivel central.
Acuña adelantó que cuando las evaluaciones concluyan, llegará el instante de reclamar esos fondos extras, en el entendido que los $6 mil millones que anunció el gobierno 'no serán suficientes para la magnitud de la tarea'.
El exintendente Cristian Rodríguez manifestó que el monto anunciado para las comunas afectadas, es una señal de la 'improvisación' con que se actúa al momento de enfrentar una catástrofe.
'Los recursos que se han asignado, para el daño a las personas, a la infraestructura, que todos hemos visto, en Taltal y en Antofagasta, me parecen francamente irrisorios, pero eso tiene que ver con que el país no cuenta con fondos propios ni una institucionalidad para enfrentar algo que es recurrente, como los fenómenos de la naturaleza', explicó.
Rodríguez acotó que esta falencia repercute en que finalmente los montos que se transfieren provengan de una redistribución entre ministerios o surjan de las arcas de las mismas regiones afectadas.
Jaime Tolosa, presidente Cámara Chilena de la Construcción Delegación Antofagasta, también consideró que el anuncio de esta semana se queda corto ante la magnitud de las necesidades.
Tolosa recordó que entre 2001 y 2002, cuando ejerció como seremi de Obras Públicas, no sólo se inauguraron varias vías aluviales, sino que además quedó planteado que tales proyectos debían seguirse construyendo.
'Pero se olvidaron de ese acuerdo y así faltan obras en Jardines del Sur, La Chimba, Tocopilla, Taltal. $6 mil millones es insuficiente para el corto plazo y para el largo plazo. Aquí hay que ver ahora las obras que faltan', indicó.
María Teresa Bustos, directora ejecutiva de la Corporación para el Desarrollo Productivo de Antofagasta, se sumó a las críticas.
'Lo encuentro terrible, hay un ninguneo a las regiones que simplemente no se ven, y tampoco tenemos liderazgos para pedir un mejor trato. Esto sería distinto si la tragedia fuera en Santiago, Valparaíso o Concepción. Ni siquiera se sabe cuánta gente está desaparecida, no conocen el territorio. ¿Dónde están los parlamentarios, las empresas, la comunidad?', interrogó.
COLEGIOS
El rector de la Universidad de Antofagasta, Luis Alberto Loyola, comentó que con los recursos anunciados es poco lo que se puede hacer para superar los efectos de las precipitaciones de la semana pasada.
'¿Cuánto costará reponer colegios, los techos, las viviendas. Cuando fue la tragedia del sur, la ayuda fue mucha y claramente lo que enfrentamos no se arreglará con estos montos. Esto no es serio, es irrisorio. El Estado debe ayudar a la comunidad y trabajar con las empresas de la región', apuntó.
El alcalde de Mejillones y presidente de la Asociación Regional de Municipalidades, Marcelino Carvajal, dijo con firmeza que los recursos comprometidos hasta ahora no serán suficientes y deben ser suplementados a la brevedad.
Carvajal citó para hoy a una reunión urgente de la asociación para discutir los desafíos que afronta la región a raíz de la emergencia climática y es posible que de allí surja un reclamo unificado de más recursos para la zona.
'Siento que cuando le toca al norte, que tanto entrega a este país, la generosidad no existe. Creo que el Estado debe inyectar más recursos y dejarse de proteger tanto a los santiaguinos. Si hay problemas con el Transantiago todos corren, pero con nosotros no ocurre lo mismo', se quejó.
Exequiel Ramírez, rector de la Universidad Santo Tomás, explicó que el país padece una excesiva centralización de la institucionalidad, lo que impide hacer un buen diagnóstico de lo ocurrido.
'Esta señal de los $6 mil millones sólo nos reafirma el centralismo que existe', indicó.
ALUVIÓN
El presidente regional del Colegio Médico, Aliro Bolados, comparó la emergencia climática de la semana pasada con lo ocurrido tras el aluvión de 1991, y concluyó que si bien ahora el costo en vidas fue muy inferior, el costo económico terminó siendo incluso mayor al afrontado hace 24 años.
Bolados explicó que los daños en calles, caminos, escuelas, viviendas y en la infraestructura educativa y de salud es severo y amerita un esfuerzo mucho más potente de las autoridades nacionales.
'Hay que hacer un estudio de cuánto es el real costo de la tragedia y lógicamente tendrán que aportar una mayor cantidad de recursos a los ya entregados', indicó el médico.
Según Bolados, sólo en el área de la salud, las precipitaciones dejaron pérdidas superiores a la suma comprometida desde el nivel central.
INDUSTRIA
Fernando Cortez, gerente de la Asociación de Industriales de Antofagasta, aseguró que las cifras no se compadecen con la catástrofe que existe.
'El volumen de esfuerzos que se requerirán es mayor y me atrevo a hacer un llamado a las autoridades para aumentar la ayuda y sacar adelante a las regiones de Antofagasta y Atacama, que tienen a la principal actividad económica del país, y en plazos razonables. Por cierto estos deben ser recursos frescos, el gasto de la reconstrucción no puede implicar la postergación de iniciativas ya financiadas', señaló el dirigente gremial.
El director de la Cámara de Comercio de Antofagasta, Antonio Sánchez, recalcó que $6 mil millones para 13 comunas de tres regiones sólo sería entendible como una primera ayuda para paliar necesidades básicas, como mediaguas, alimentos, medicinas o limpieza de calles, ya que el costo de las obras públicas definitivas es muchísimo más elevado.
'Si el gobierno aduce no contar con recursos en forma inmediata recordemos que sólo los montos pagados por Hugo Bravo y las empresas Penta y SQM como compensación por los fraudes de los cuales están acusados, superan los $10 mil millones, y esos montos son extras al presupuesto nacional, por tanto el gobierno no puede aducir que esos recursos ya estaban asignados a algún fin específico', señaló.
'Rapidez'
El dirigente vecinal, Julio Sepúlveda, del sector Estadio Regional, valoró la 'rapidez' con que se concretó el aporte a través de la Subdere, asegurando que no se vio lo mismo en la emergencia de 1991, cuando el alcalde de la época (Floreal Recabarren) 'no tenía ni para comprar una baldosa'.
'Ahora, entiendo esto (los $6 mil millones) como una primera medida frente a la emergencia, no como una respuesta total a la misma', argumentó.
A su vez, el rector del Inacap, Patricio Valdivia, lamentó que los recursos existentes para las personas evacuadas y más afectadas por la lluvia se acabaran a las pocas horas.
'Eso no puede ser. Agua, alimentación y abrigo no pueden estar en una bodeguita y $6 mil millones, para lo que aporta la región, parecen muy poco', señaló el también exalcalde de Antofagasta.