CMDS y Conacep divididos por efectos de reforma educacional
Matrículas. 300 estudiantes del sector subvencionado se cambiaron al público.
A pocos días de su aprobación en el Congreso, los tres ejes que sustentan la reforma educacional (fin al lucro, copago y selección) son objeto de visiones dispares en Antofagasta.
Por un lado, están los establecimientos con subvención del Estado agrupados en la Corporación Nacional de Colegios Particulares Subvencionados (Conacep), y en la otra vereda la Dirección de Educación de la Corporación Municipal de Desarrollo Social (CMDS).
Mientras el primero habla de un éxodo a la educación pública de miles estudiantes cuando opere la reforma, Carla Venegas, directora de Educación de la CMDS, maneja otras cifras.
"De los 36.000 alumnos matriculados a la fecha y de los 43.000 que podemos recibir, sólo 300 casos vienen de establecimientos con subvención del Estado. Un margen normal a pocos días de la aprobación de la reforma", agregó.
Venegas tiene una postura positiva sobre la puesta en marcha de la primera etapa que considera el fin de la selección, el copago y el lucro, "las consecuencias se reflejarán en la región recién el 2020, ya que el cambio será gradual, por regiones según el número de habitantes".
En ese contexto, aclaró que "se terminará con el sistema de selección partiendo desde un 85% hasta llegar al 0%, pero las unidades con características históricas como el Liceo 'Andrés Sabella' mantendrán una selección de un 30% de los estudiantes que quieran ingresar, hasta el 2023. Esa es una de las excepciones que presenta la ley".
Sobre una posible sobre-demanda, la directora de Educación dijo que pensarán en un procedimiento para evitar la congestión ya que aún hay tiempo. "Mejoraremos la visión de la comunidad hacia los liceos con matrículas disponibles, como el A-22 que tiene las mismas especialidades que el A-16 y queda en el mismo sector", explicó.
A largo plazo, Venegas piensa que los cambios van bien encaminados, pero con una condicionante, "debemos hacer una autocrítica y mejorar la calidad de todos nuestros establecimientos para responder al nivel de demanda y satisfacer las necesidades de la sociedad, porque ése es el espíritu de la reforma que el estudiante pueda elegir donde quiere estudiar".
Críticas
Una visión distinta tiene Marco Riquelme, presidente regional de Conacep.
"Esta es una pésima noticia para la educación y la clase media, ya que no se considera la calidad. No sé si todos están dispuestos a poner a sus hijos en la educación pública", señaló.
En la ciudad la reforma afectaría al 80% de los colegios particulares subvencionados con una matrícula de más de 20.000 alumnos, según las cifras de la agrupación.
Ante este escenario, dijo Riquelme, pasarían a un modelo particular pagado, "el 2016 varios colegios pasarán a otro sistema o desaparecerán. Esto no es una amenaza, sino algo real, ya que en las actuales condiciones no podrán funcionar con la misma modalidad".