Un puerto ciudadano
Emile Ugarte
¡Bien! por el seremi de Obras Públicas, César Benítez, y Minera Escondida por reactivar el proyecto Bicentenario La Chimba, playa artificial más grande de Chile, detenido por el gobierno anterior que lo transformaría en un terminal portuario de concentrado de cobre.
¡Mal! por la Contraloría General de la República que no se ha manifestado hasta ahora, por el ilícito cometido por las autoridades regionales anteriores que participaron en la Comisión Regional Ambiental, y no dedicaron treinta minutos en leer los 92 artículos de la Ley 19.300 Sobre Bases Generales del Medio Ambiente… no habrían aprobado en forma ilegal las tres resoluciones.
¡Bien! por nuestros senadores que denunciarán a la OCDE el actuar de las empresas FCAB, ATI y Minera Sierra Gorda SCM; vulneraron nuestra ley ambiental con el objetivo de bajar costos, perjudicando para siempre una ciudad.
¡Mal! por la Seremi de Salud que nada ha hecho por la contaminación portuaria con metales pesados, denunciada por este Diario y el Colegio Médico.
¡Mal! por el Minvu que no se ha manifestado por la ubicación del galpón, que imposibilitará por lo menos diecinueve años más (años que le quedan de concesión a la ATI), finalizar el proyecto del Seccional Costanera Central del Premio Nacional de Arquitectura Víctor Gubbins, que se inició el año 2005 y que da continuidad peatonal al borde costero.
¡Mal! por la EPA, si no rechaza la solicitud de la ATI de aumentar su concesión en diez años más.
¡Mal! por nuestra Presidenta Michelle Bachelet que no ha derogado el Decreto Supremo del Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones, que autoriza la ampliación portuaria que transformará Antofagasta en un terminal de concentrado de cobre y poner fin a una ciudad.
La Región debe volver a la estrategia propuesta por el exPresidente Eduardo Frei Ruiz Tagle: transformar y desarrollar el puerto de Antofagasta en uno ciudadano y Mejillones en un Megapuerto del Pacífico.
El primer paso para ello debe ser que Codelco entregue al Estado el Complejo Portuario de Mejillones, para que su desarrollo vaya más allá de la función minera y logremos diversificar nuestra economía, convirtiéndonos en una plataforma comercial para América Latina, generando sustentabilidad ambiental y económica.