Realidad de profesores
Probablemente el nombre de Alicia Morales no resulte del todo claro o reconocible. Pero si se especifica que se trata de la profesora que terminó pidiendo limosnas en las calles de Copiapó, la situación puede ser distinta. Hace unos días, se dio a conocer a nivel nacional el estado de esta maestra jubilada, quien hoy debe vivir de la caridad ante los escasos recursos que posee y que son el pobre pago de esta sociedad luego de una vida dedicada a la formación de miles de personas en la Región de Atacama. La realidad de la profesora Morales es dramática y pone de relieve no sólo la indefensión en la que se pueden encontrar muchos adultos mayores, sino que también lo ineficiente que puede ser el sistema a la hora de brindar una vejez digna a miles de personas de la tercera edad. Un aspecto no menor, si se considera que Chile es un país que tiende a ser 'más viejo'.
Se espera que hacia el año 2025, la cantidad de nacimientos en Chile quedará por debajo de la cantidad de habitantes en el segmento de la tercera edad. Hoy, más de 2 millones 600 mil personas tienen más de 60 años, lo que representa un 15% de la población nacional. Las proyecciones indican que a mediados de siglo, un tercio de los habitantes de un país que estará entre los más importantes en cuanto a población adulta mayor.
Estos antecedentes llevan a la reflexión respecto a las condiciones en que se desenvolverán aquellos hombres y mujeres una vez que integren el segmento más longevo. El caso de la profesora Morales, en Copiapó, es preocupante. No se trata sólo de las condiciones que da el Estado, con aspectos como la jubilación y la protección social, que en sí es ya un tema que reclama especial atención.
Sin embargo, está también la manera en cómo el implacable costo de la vida, especialmente en las ciudades del norte de Chile, puede ser despiadado con personas que aun habiendo sido profesionales y contando con un trabajo, tengan que terminar en la calle. ¿Qué se puede esperar para quienes tuvieron menos oportunidades durante su vida laboral? Chile debe orientarse a una cultura que valore, respete y salvaguarde a los adultos mayores.