'La gratuidad de la educación superior no se transa'.
La opinión del presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Antofagasta, Pablo Herrera, refleja en gran parte el pensar de los universitarios a nivel regional, quienes también son parte del movimiento estudiantil que lidera el debate en el país (Confech) desde la tribuna de la educación superior.
Esta opinión, en la actualidad, cobra mayor relevancia tras la discusión política que se ha generado en torno al proyecto de la reforma educacional, su financiamiento y cobertura.
Y en ese contexto los dirigentes estudiantiles son bastante críticos ante el proyecto que está impulsando el Ejecutivo, que por lo demás ya está en tramitación legislativa al interior del Congreso.
críticas
Pablo Herrera (UA) argumentó que la propuesta del gobierno, en primera instancia, fue algo ambigua y bastante difícil de interpretar.
'Siempre hemos planteado que la reforma es insuficiente para resolver el problema de fondo que tiene la educación, porque las iniciativas que ya han sido presentadas, como el fin al copago o el término a la selección, son proyectos que vienen a regular el mercado que ya existe', dijo.
El dirigente universitario planteó que la educación pública no sólo debe ser una opción para el país a parte de los establecimientos privados, sino que es urgente que esa posibilidad sea la mejor alternativa.
'Cuando hablamos de fortalecer los establecimientos públicos, no sólo lo hacemos pensando en mejorar los aportes basales (financiamiento), sino que también buscamos fortalecer la educación mejorando la calidad en todos sus aspectos, infraestructura, equipamiento y el nivel de los profesores', dijo.
Herrera recalcó que un proyecto con los alcances que tendrá la reforma educacional no puede ser discutido sin la participación de los actores que impulsaron el cambio (estudiantes y magisterio, entre otros), porque a juicio del dirigente estudiantil, el gobierno está aún al debe en esta materia y los espacios que se han generado son insuficientes.
financiamiento
Desde algunos sectores se plantea que existen dudas si efectivamente el gobierno logrará recaudar los fondos para financiar la gratuidad educacional, aprensiones que surgen luego de que el secretario ejecutivo de la reforma, Andrés Palma, afirmara que sólo el 30% de los fondos extras recaudados para educación irán a la enseñanza superior, unos US$1.500 millones. Otro porcentaje importante será destinado a la enseñanza inicial.
Según el secretario general de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica del Norte, Pablo Tapia, fortalecer la educación inicial es uno de los aspectos más importantes para mejorar el sistema a futuro, aunque recalcó, que la gratuidad universitaria no es una propuesta que pueda ser negociada.
'Para mejorar la calidad en todos los aspectos es necesario partir de la base, pero tampoco hay que arriesgar el acceso a la enseñanza superior y esa definición la tienen todas la federaciones que integran la Confech', dijo.
Palma argumentó que en la actualidad plantearse condicionantes en cuanto a la cobertura de la educación está fuera de toda discusión y es un derecho que debe estar garantizado para todos.
'Esperamos que todos los actores que están participando en el debate de este proyecto apunten para un mismo lado, para que de una vez se resuelvan las brechas educacionales que tiene el país', indicó el dirigente.
30%