Mujeres ganan terreno como operadoras de grúas en puertos
pioneras. Mejilloninas encontraron nuevas oportunidades laborales.
Atrás quedaron los tiempos en que la mujer estaba relegada a labores de oficina o de administración. Hoy asumieron roles completamente diferentes. Un grupo de mujeres de Ultraport, en Puerto Angamos, asumió el desafío de operar diversas maquinarias portuarias.
'Estamos trabajando fuertemente en la inclusión de las mujeres. Ellas estaban abocadas a funciones más bien documentales, pero ahora esa realidad está cambiando. Hoy estamos viendo un tema distinto, y que tiene que ver con incorporarlas en funciones distintas como es el manejo de equipos', sostuvo Marcelo Basili, gerente de Ultraport, Puerto Angamos.
Comentó que están trabajando en un programa intensivo considerando a gente de la comuna, a mejilloninas. Hay mujeres que fueron especializadas en el manejo de grúas horquillas, y también están partiendo con la primera winchera en Chile.
'Consideramos que la mujer tiene un rol relevante, ya que tienen todas las potencialidades que les permiten cumplir de la mejor forma cualquier función', comentó.
Comuna
El 60% de la dotación del Puerto Angamos es gente de la comuna. Para ello se está trabajando en un programa con el municipio, ya que se busca arraigo, identificación de la gente con su puerto.
El desempeño de las mujeres en las distintas áreas es avaluado como de muy 'positivo'. 'Como compañía hacemos una buena evaluación del desempeño de las mujeres, que son altamente responsables y dedicadas a su labor', explicó Basili.
Carolina Miranda (25) trabaja en una grúa horquilla y ahora está operando un tracto camión. 'Llegué hace cuatro meses a la empresa, y tenía conocimientos de maquinaria pesada. Pero terminé la inducción y ahora estoy trabajando. Me siento muy feliz en este trabajo y tengo muchas metas a futuro. Quiero avanzar y hacer un buen trabajo, vivo en Antofagasta y viajo a cumplir los diferentes turnos. Me parece excelente la incorporación de la mujer a faenas portuarias', afirmó.
María José Chaparro (25) ingresó como tarjadora (área documental) y postuló a la grúa horquilla. 'Estoy tan contenta porque hace tiempo me quería subir a las máquinas. Siempre me gustó esto y llevo cinco años en esta empresa, y no me quería ir porque pensaba que algún día habría cursos y oportunidades para nosotras', dijo.
Otra de las mujeres que está marcando pauta en el puerto es Paula Espinoza (40). También se desempeña en la grúa horquilla, y como buena mejillonina se siente agradecida de la oportunidad que le dio Ultraport de entrar a la capacitación.
'Podemos estar en cualquier área, por lo que el trabajo se torna entretenido. Todos los días rotamos, y por eso trabajamos con gusto, con muchas ganas. Además estamos aprendiendo siempre cosas nuevas', dijo.
Las operadoras cumplen turnos de 8 ocho horas y siempre están muy pendientes del aspecto relacionado con la seguridad. Dicen que son más cautelosas y se preocupan de todos los detalles.
Paula Espinoza manifestó que asumió su labor con mucha responsabilidad y entusiasmo.
Jocelyn Salazar (25) es una flamante winchera que entrará en operaciones. Ella es quien operará una grúa ubicada en la nave. Se trata de un trabajo específico, en el que Ultraport está siendo pionero, obviamente en cuanto a la inclusión de la mujer.
'Me llama mucho la atención el tema de la seguridad. Somos un equipo y debemos estar atentos a cualquier maniobra. Me parece excelente que la empresa nos esté dando la oportunidad de incorporarnos en esta área', añadió.