Creo Antofagasta, que trabaja en el desarrollo de un plan de largo plazo, se confirma como un actor relevante, porque esta instancia nos puede ayudar a delinear qué ciudad es la que deseamos construir para el futuro.
"La intervención del Balneario Municipal es un fiel ejemplo de lo que debemos hacer en la ciudad".
La ciudad de Antofagasta ha crecido a pasos agigantados en los últimos años y con ello el desorden en las calles, dejando en evidencia que no existían políticas comunales concretas para velar por un crecimiento armonioso y equilibrado en los espacios públicos. Ejemplo de esto fue la supuesta solución tomada en el centro de nuestra ciudad con los carros azules, mal llamados ambulantes, medida que ha entorpecido tanto el orden, como la estabilidad laboral de los comerciantes, que hasta el día de hoy viven una gran incertidumbre a razón de las promesas no cumplidas. Así también quienes transitamos por el centro de la ciudad somos los que pagamos las consecuencias: congestión, estética, inseguridad, insalubridad, generando las incomodidades en ancianos, discapacitados y peatones en general, incluso para los propios comerciantes.
Recuperar los espacios públicos no significa erradicar o eliminar el comercio callejero, por el contrario, se trata de potenciar a los trabajadores que cumplen con esa respetada e importante labor bajo una política de orden que activará adecuadamente un espacio comunitario.
En todas partes del mundo existen artesanos, músicos, pintores, malabaristas, etc. que permiten potenciar el turismo. Sin embargo, para lograr que estas actividades sean bien recibidas por los ciudadanos y turistas, debemos ubicarlos en lugares estratégicos de nuestra comuna, ofreciendo mejoras transversales para los comerciantes y la comunidad que van de la mano con el desarrollo turístico de la ciudad.
La intervención en el sector del Balneario Municipal, es un fiel ejemplo de que lo debemos hacer. Hemos recuperado un sector, entregando las herramientas necesarias para trabajar de manera limpia, segura y ordenada a quienes por años han trabajado en ese sector y, debido a la falta de visión por parte de las autoridades, se habían transformado en un verdadero foco de insalubridad e inseguridad.
Mis ejes estratégicos como alcaldesa apuntan a tener una ciudad más armoniosa, atractiva y coordinada con nuestros emprendedores de los espacios públicos. Estoy segura que gracias a la participación de la ciudadanía, comerciantes y el equipo técnico municipal, lograremos el ordenamiento de nuestra ciudad con gestiones inteligentes que nos transformarán en un gran polo turístico del norte de Chile.
Alcaldesa de Antofagasta