Misión universitaria en Antofagasta
"¿Qué han hecho las universidades foráneas por vincularse con la comunidad antofagastina?".
Las universidades publican pomposamente su misión, en ellas se pueden encontrar conceptos tales como generación, promoción, difusión y preservación de la ciencia, la tecnología, el arte y la cultura, formación de profesionales competentes, preocupación por el desarrollo sustentable, etc., etc., etc. Pero, ¿cuánto de todo aquello es cierto? o es solo un bonito discurso.
En la Región de Antofagasta actualmente operan 11 universidades. De éstas, sólo dos son originarias de la zona, la estatal Universidad de Antofagasta y la privada Universidad Católica del Norte.
Ambas poseen amplia tradición y arraigo en la ciudad, están acreditadas, su ingreso es vía PSU y cuentan con infraestructura para desarrollar apropiadamente sus planes de estudio. Del resto sólo se observa que las universidades Santo Tomás e Inacap han invertido en la construcción de una infraestructura adecuada para impartir sus carreras. Las otras sólo arriendan precarias instalaciones.
Si la ley las faculta para operar de esa forma, poco se puede hacer, pero ¿qué hay del espíritu universitario?, ese conjunto de valores intelectuales que son la base de una comunidad académica llamada Universidad. Aquel que Octavio Arizmendi resalta como amor a la verdad, la curiosidad intelectual, la humildad, el rigor, la laboriosidad y la cooperación intelectual; aquellos valores que constituyen un clima cultural propicio para la convivencia formativa, la búsqueda del conocimiento y el engrandecimiento de la comunidad.
¿Qué han hecho las universidades foráneas por vincularse con la comunidad antofagastina, por aportarnos con su saber, por investigar, por desarrollar actividades de extensión, por irradiar cultura?
Es una vergüenza que incluso algunas lleven operando en Antofagasta más de 10 años y no hayan aportado nada, mostrándose sólo como mezquinas instituciones con intereses puramente económicos y nada más, donde lo importante para ellas es tener alumnos con dinero para pagar sus mensualidades, pero ¡de extensión, cultura e investigación, nada! Misión universitaria, ¿verdad o mentira?
Mario Vernal Artista